Diferencias entre Presbicia e Hipermetropía

Diferencias entre Presbicia e Hipermetropía

¿Sabes reconocer las diferencias?


Tanto la presbicia como la hipermetropía son dos errores de refracción del ojo muy comunes, pero no por ello totalmente iguales. De hecho, existen diferencias entre uno y otro. Vamos a hablar de qué es cada error de refracción y qué diferencias provocan, para que las puedas reconocer.

¿Qué es la presbicia?


La presbicia (también denominada vista cansada), provoca que los músculos del interior del ojo pierdan elasticidad debido al paso del tiempo. El cristalino, por su parte, se va haciendo menos flexible, por lo que la capacidad para acomodar y de este modo ver de cerca, se va aminorando con la edad. Esta situación provoca que no podremos ver con claridad los objetos o textos cercanos.

¿Qué es la hipermetropía?


La hipermetropía, por su parte, tiene una característica principal, la visión borrosa de los objetos cercanos, más o menos cuando se encuentran cerca de nosotros hasta un máximo de 6 metros. Afecta normalmente a recién nacidos y a niños, ya que su sistema visual todavía no está completamente desarrollado, pero durante el periodo de crecimiento tiende a corregirse.

Diferencias entre presbicia e hipermetropía


Ya tenemos claro que las causas de ambas son totalmente diferentes. Una afecta debido al paso de la edad y la pérdida de elasticidad de los músculos del ojo, mientras que la otra afecta por el desarrollo no adecuado del sistema visual de las personas, y suele tener su origen en la niñez.
Otra diferencia es la que hace referencia a la edad, de nuevo. Si tienes más de 40 años y has empezado a notar que no enfocas bien la vista cuando intentas leer de cerca, sobre todo en condiciones de poca luz, tendrás presbicia, y no hipermetropía.

En el caso de un niño o un adolescente, es imposible que tenga síntomas de presbicia, porque su cristalino estará elástico, mientras que sí podría tener problemas de acomodación del ojo con esa edad. Es decir, en una persona con hipermetropía, la acomodación del ojo estará siempre desde que le aparezca el error de refracción, por ejemplo, de joven o de adulto. Sin embargo, una persona con vista cansada, no habrá tenido problemas de acomodación hasta que no le aparece la presbicia.